30 de diciembre de 2005

Un gran consejo

Las ventajas de la prosperidad deben utilizarse para reparar anteriores desequilibrios y crear garantías contra las dificultades futuras.

En la vida hay que elegir entre ganar dinero o gastarlo, no hay tiempo suficiente para ambas cosas, al menos en los tiempos que corren. Y el hombre o la mujer, que sabe gastar y ahorrar es el más feliz, porque disfruta de ambas cosas. Aunque el hombre o la mujer, que vive con más desahogo no es el que tiene más, sino el que administra bien lo mucho o poco que tiene. Nada te puede dar una dignidad tan respetable, ni una independencia tan grande como el no gastar más de lo que gastamos.

El ahorrar dinero se ve como algo poético porque es pura creación. Ahora con la cuesta de enero volveremos al derroche. Yo soy de los que piensa que quien compra lo superfluo no tardará en vender lo necesario. Si eres capaz de gastar menos de lo que ganas, entonces habrás encontrado el tesoro de Harry Potter, “la piedra filosofal”.

Como dijo Séneca: “Compra sólo lo necesario no lo conveniente. Lo innecesario, aunque cueste un céntimo, es caro”.

Alberto Zambade Santiago

Estudiante de Sociología

No hay comentarios: